Nuestro compañero Francisco Perea Espinosa nació el 9 de Abril de 1981 en Cabra de Santo Cristo (Jaén). En la actualidad es enfermero del servicio de Urgencias del Hospital “Mancha Centro” de Alcázar de San Juan (Ciudad Real). Junto a su especialización como sanitario suma su vocación temprana por el Ajedrez que se plasma en su título de monitor nacional por la Federación Española de Ajedrez (FEDA) especializado en ajedrez escolar para niños con diversos trastornos del comportamiento.
“Ajedrez y enfermería me permiten humanizar los cuidados y promover la educación para la salud”
Se diplomó en enfermería por la Escuela Universitaria “Francisco Maldonado” de Osuna (Sevilla). Es Graduado Universitario de Enfermería por la Universidad Europea de Madrid. Máster en Psicofarmacología por la Universidad de Valencia.Tutor adjunto de Enfermería en la Universidad de Albacete para el máster en “Cuidados en pacientes críticos en Urgencias y Emergencias”, además del mencionado título de monitor nacional por la Federación Española de Ajedrez (FEDA) especialista en ajedrez escolar para ñiños con diversos trastornos del comportamiento.
Paco Perea es enfermero de urgencias y monitor de Ajedrez, especialista en la enseñanza a niños con diversos trastornos del comportamiento.
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R. Por vocación. Enfermería es el arte de cuidar. Disfruto con esta maravillosa profesión y lucho por su autonomía como disciplina.
2. Enfermería es una profesión muy completa que exige destreza en todos los ámbitos de la medicina debido a la falta de especialidades. ¿Cree que hay algo que une a los profesionales?
R. La relación enfermera-paciente. Ésto debería ser asignatura troncal en la Universidad. Impartida desde el debate, el diálogo y la participación directa en las clases del alumno. Mi espejo es Baldo Maya, profesor titular de la Universidad de Osuna (Sevilla). Él consiguió que mi promoción fuese especial, que cada uno de los que con él aprendimos nos sintiésemos únicos y diésemos éstos cuidados especiales a cada paciente. Para mí en esto radica el verdadero arte de la Enfermería, ya que cualquiera puede aprender en dos o tres días a canalizar una via venosa periférica.
3. La relación enfermera-paciente es algo que usted siempre tiene muy presente desde que fuera secretario del grupo de humanización de los cuidados de su hospital, La Mancha Centro, donde trabaja.
R. Es que es esto lo que verdaderamente nos hace ser enfermeros. El humanizar los actos clínicos y nuestras intervenciones.
4.¿Qué le parece su trabajo en Urgencias?
R. Un reto diario. Una actualización constante. Confieso que a menudo vivo situaciones estresantes, agobiantes y de cierta ignorancia ante las cuales agradezco el apoyo de mis compañeros.
5. Por cierto, dicen sus compañeros que a usted le gusta la docencia.
R. Si, es cierto. Creo que es una parte de nuestro trabajo en la que me encuentro muy cómodo y en la que recibes mucho: Ilusión, ideas, motivación, ganas de aprender, etc. por parte de los alumnos. Por otro lado las preguntas que me plantean me obligan a realizar una actualización constante que es muy beneficiosa y estimulante a efectos prácticos en Urgencias. Me gusta sembrar la semilla del pensamiento crítico y ellos la reciben y la cultivan con esmero.
“El trabajo con niños supone un gran esfuerzo constante, diario, individualizado, pero con sus abrazos te arrancan la mejor sonrisa. Vivir un dia con ellos es alargar un año más tu vida”.
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6. Pero no sólo practica la docencia en el ámbito hospitalario sino que en los colegios enseña ajedrez
R. Jajaja…En el hospital aprendo de mis compañeros más que enseño a los alumnos. En el cole disfruto enseñando ajedrez y aprendiendo de los niños.
7.¿Solo a los niños?
R. No, a los maestros también. Ya que han demostrado tener mucho interés en aprender la transversalidad del ajedrez en las materias escolares.También aprendo de su didáctica y de su pedagogía. Y ellos de mis técnicas para buscar la motivación en el aprendizaje.
8.¿Cómo es esto del ajedrez en la escuela?
R. Todo gracias a los maestros, directores de colegio, orientadores escolares, etc…porque ellos mantienen el orden en el aula y nos ponen todo muy fácil. Yo intento enseñar ajedrez, procuro enseñar a pensar, y mejorar su rendimiento académico.
9. Pero no se queda ahi, sino que va más allá atendiendo a niños con dificultades.
R. Cierto. Doy clases a niños con diversa patología mental aprovechando mii especialidad en TDAH y TEA.
10. Se le ve muy contento al hablar de esto. ¿Qué le aporta esta disciplina a su trabajo como enfermero?
R.La verdad es que este apartado de mi carrera profesional me está realizando por completo. Creo que viene a llenar un hueco muy importante de mi ser: El social y el pedagógico.
11.¿Es el trabajo con niños más estimulante que el contacto con el paciente?
R. Es diferente. Los niños te llenan el corazón. El trabajo con ellos supone un gran esfuerzo constante, diario, individualizado, pero con sus abrazos te arrancan la mejor sonrisa. Vivir un dia con ellos es alargar un año más tu vida.
12. ¿Crees que esto de la docencia se lleva dentro o la vas adquiriendo?
R. Yo creo que es una mezcla de ambas cosas. Uno lo lleva dentro y a medida que va teniendo oportunidad lo saca, lo pule y lo entrega a los demás. Yo me crié en un ambiente de maestros (mi madre es maestra) y gracias a ella tengo esa afinidad. !!Gracias mamá!!
Hace años consiguió el título de Monitor base de Ajedrez por la FEDA. Después llegó la especialización en ajedrez escolar para niños con TDAH y TEA.
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13. ¿Cuándo se despertó en ti el gusanillo del ajedrez?
R. Empecé con cinco años jugando en el club de mi pueblo. Me federaron y competí en categorías andaluzas. Siempre me gustó enseñar a los menores en mi club. Hace pocos años aproveché mi formación a través del cub de ajedrez “Nuestro Ajedrez en Europa” y conseguí el título de de Monitor base de Ajedrez por la FEDA. Después llegó la especialización en ajedrez escolar para niños con TDAH y TEA.
14.¿Qué le ha aportado la experiencia?
R. A nivel emocional un mundo. Todas las percepciones, ideas, sentimientos, etc. se multiplican a nivel exponencial cuando estás en contacto con estos niños tan “guapos por dentro”. Por tanto las vivencias son muy en riquecedoras. En el ámbito personal me aporta sabiduría y calma. Tomo la vida con otra filosofía y vivo ilusionado con este proyecto.
En el ámbito profesional me aporta conocimientos, aumenta mi inquietud por la salud mental (que me encanta) y humildad. Los niños y sus familias constituyen un reto para mí. Suponen esforzarme todos los dias en retos pequeños para ir sumando y así conseguir al final grandes cosas para estas grandes personas.
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Autores: Redacción